¿Qué es la obesidad?
La
obesidad significa que usted tiene una cantidad excesiva de grasa corporal.
Todas las personas necesitan un poco de grasa corporal, pero tener demasiada
puede ocasionar problemas de salud.
El
sobrepeso y la obesidad se definen usando una herramienta llamada
índice de masa corporal (IMC,o BMI por sus siglas en ingles). El IMC es una forma de
calcular el total de grasa corporal en la mayoría de las personas. La manera más
fácil de averiguar su IMC es utilizar la tabla IMC para adultos (vea a
continuación). También puede encontrar una práctica calculadora del IMC en el
sitio Web del Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre (vea los
recursos al final de la sección de Preguntas Frecuentes). Para averiguar su IMC
necesita saber cuál es su altura y peso. O también puede anotar su peso en
libras, dividirlo entre su estatura (medida en pulgadas) cuadrada y multiplicar
el resultado por 703 para obtener su IMC
Si
su IMC es de 25 a 29.9, usted está en la categoría de "sobrepeso."
Si su IMC es de 30 ó más, usted está en la categoría de "obeso."
Existen tres clases de obesidad:
-
Obesidad
de Clase I -IMC de 30 a 34.9
-
Obesidad
de Clase II -IMC de 35 a 39.9
-
Obesidad
de Clase III -IMC de 40 ó más
En
general, entre más sobrepase su IMC el 25, mayores serán los riesgos para la
salud relacionados con el peso.
¿Qué
ocasiona el exceso de peso y la obesidad?
Las
principales causas de ser obeso o tener sobrepeso son comer demasiado o no ser
lo suficientemente activa. Si come más calorías de las que quema su cuerpo,
esas calorías adicionales se almacenarán como grasa. Todas las personas tienen
un poco de grasa almacenada. Pero demasiada grasa da como resultado el sobrepeso
u obesidad. Otros factores que podrían afectar su peso incluyen sus genes (la
obesidad tiende a ser hereditaria en algunas familias), su metabolismo (la forma
en que su organismo procesa los alimentos), su grupo étnico o racial y su edad.
Algunas veces una enfermedad o medicina puede contribuir al aumento de peso. Los
investigadores están analizando las causas de la obesidad para obtener más
información sobre la forma de prevenirla y revertirla.
¿Cuáles
son algunos de los problemas de salud graves relacionados con la obesidad?
Si
tiene sobrepeso o es obeso, usted tiene más probabilidades de desarrollar
problemas de salud como enfermedades cardiacas, diabetes y algunos tipos de cáncer.
La buena noticia es que perder peso puede mejorar la forma en que funciona su
corazón, bajar su presión arterial, mejorar sus niveles de colesterol y
disminuir las probabilidades de que tenga otros problemas de salud.
El
sobrepeso y la obesidad están relacionados con:
-
Las
enfermedades cardiacas. Las enfermedades cardiacas son la principal causa de
mortandad de mujeres y hombres en los Estados Unidos. Entre las enfermedades
cardiacas se incluyen el ataque cardiaco, la insuficiencia cardiaca y la angina
de pecho (dolor en el pecho ocasionado por una reducción en el flujo
de sangre al corazón).
-
El
derrame cerebral. En algunas ocasiones un derrame cerebral se conoce también
como apoplejía o "ataque cerebral." Casi todos los derrames
cerebrales son causados por un coágulo de sangre que obstruye una arteria
que lleva sangre al cerebro.
-
La
diabetes. Las personas con sobrepeso tienen el doble de probabilidades de
desarrollar la diabetes de tipo 2 que las personas sin sobrepeso. La
diabetes de tipo 2 disminuye la capacidad del organismo para controlar el azúcar
en la sangre. Es una de las principales causas de muerte temprana,
enfermedades cardiacas, enfermedades renales (de los riñones), derrame
cerebral y ceguera. Si tiene diabetes de tipo 2, perder peso y ser más
activa físicamente pueden ayudar a controlar sus niveles de azúcar en la
sangre. También es posible que pueda reducir la cantidad de medicina que
necesita.
-
El
cáncer de la vesícula, seno, útero, cerviz y ovarios (en el caso de las
mujeres). Los hombres con sobrepeso tienen más riesgo de desarrollar cáncer
de colon, recto y próstata.
-
Las
enfermedades de la vesícula o cálculos biliares. Las enfermedades de la
vesícula y los cálculos biliares son más comunes si usted tiene
sobrepeso. Su riesgo de sufrir estas enfermedades se incrementa a medida que
aumenta de peso. Pero la pérdida
de peso por sí misma, en particular la pérdida
rápida de peso o de grandes cantidades de peso, en realidad puede aumentar
las probabilidades de desarrollar cálculos biliares. Perder peso de forma
moderada y lenta, aproximadamente 1 libra a la semana, hace menos probable
que cause los cálculos biliares.
-
La
osteoartritis (desgaste de las articulaciones). La osteoartritis es un
trastorno común de las articulaciones que afecta con mayor frecuencia las
articulaciones de las rodillas, cadera y parte baja de la espalda. El peso
adicional añade más presión a estas articulaciones y desgasta los cartílagos
(el tejido que envuelve las articulaciones) que normalmente las protegen. La
pérdida de peso puede aliviar los síntomas de la osteoartritis.
-
La
gota (dolor en las articulaciones ocasionado por un exceso de ácido úrico).
La gota es una enfermedad de las articulaciones causada por altos niveles de
ácido úrico en la sangre. Algunas veces el ácido úrico forma cristales
que se depositan en las articulaciones. La gota es más común en personas
con sobrepeso. Si tiene antecedentes de gota, consulte con su doctor antes
de intentar perder peso. Algunas dietas pueden provocar un ataque de gota en
personas que tienen altos niveles de ácido úrico o que tuvieron gota en el
pasado.
-
Los
problemas respiratorios, incluyendo apnea del sueño (respiración
entrecortada mientras duerme). La apnea del sueño es una condición grave
que puede ocasionar que una persona deje de respirar durante cortos períodos
mientras duerme y que ronque mucho. También puede causar somnolencia
durante el día e incluso insuficiencia cardiaca. El riesgo de tener apnea
del sueño aumenta con pesos corporales mayores. La pérdida de peso
normalmente mejora este padecimiento.
-
El
colesterol elevado en la sangre. Los niveles elevados del colesterol total,
el colesterol LBD ("colesterol malo," o LDL por sus siglas en inglés)
y los triglicéridos (otro tipo de grasa en la sangre) pueden
provocar una enfermedad cardiaca. La obesidad también se relaciona con los
niveles reducidos de colesterol LAD ("colesterol bueno," o HDL por
sus siglas en inglés). La pérdida de peso puede mejorar sus niveles de
colesterol.
-
La
hipertensión sanguínea (alta presión arterial). La hipertensión sanguínea
es uno de los principales factores de riesgo de las enfermedades cardiacas y
el derrame cerebral. Los adultos obesos tienen el doble de probabilidades de
desarrollar hipertensión sanguínea que los adultos con un peso saludable.
La pérdida de peso puede reducir su presión arterial.
-
Las
complicaciones del embarazo. La obesidad incrementa los riesgos de la
hipertensión sanguínea y cierto tipo de diabetes que se desarrolla durante
el embarazo. Las mujeres obesas tienen más probabilidades de enfrentar
problemas durante el trabajo de parto y el alumbramiento.
-
Los
ciclos mensuales irregulares y la infertilidad. La obesidad abdominal está
relacionada con el síndrome de ovario policístico, una de las
causas de infertilidad en las mujeres.
-
Los
efectos sociales y psicológicos, como la depresión y discriminación. Uno
de los aspectos más dolorosos de la obesidad podría ser el sufrimiento
emocional que provoca. La sociedad norteamericana le da gran importancia a
la apariencia física y a menudo equipara el atractivo con la delgadez,
especialmente en las mujeres. Los mensajes, intencionales o no, hacen sentir
poco atractivas a las personas con sobrepeso. Las personas obesas enfrentan
prejuicios o discriminación en el trabajo, la escuela, cuando buscan un
trabajo y en eventos sociales. Son comunes los sentimientos de rechazo, vergüenza
o depresión.
¿Qué
el síndrome metabólico y la obesidad abdominal?
Las
pautas nacionales más recientes para prevenir y controlar el colesterol elevado
en la sangre describen un grupo de factores de riesgo llamado síndrome
metabólico. La obesidad abdominal, la cual se define como tener una
cintura grande (más de 35 pulgadas en las mujeres y 40 en los hombres), es
parte de este síndrome. El síndrome metabólico está relacionado con la resistencia
a la insulina (la cual puede provocar diabetes) y un mayor riesgo de
contraer enfermedades cardiacas. Usted padece del síndrome metabólico si tiene
por lo menos tres de los siguientes factores de riesgo:
-
una
medida grande de cintura (obesidad abdominal) de más de 35 pulgadas para
las mujeres
-
triglicéridos
elevados (150 ó más)
-
un
bajo nivel de colesterol "bueno" o LAD (para las mujeres menores
de 50 años)
-
presión
arterial de 130/85 ó más
-
una
medida de glucosa en ayunas (azúcar en la sangre) de 110 ó más.
Mejorar
la dieta, perder peso e incrementar la actividad física son muy importantes si
usted tiene el síndrome metabólico.
¿Cómo
puedo mejorar mi salud si soy obeso?
La
clave para alcanzar y mantener un peso corporal sano (o más sano) es seguir una
dieta saludable y haga la actividad física
regularidad. El Secretario de Salud sugiere las siguientes medidas para una
mejor salud.
-
Fíjese
el objetivo de tener un peso saludable. Si tiene sobrepeso o es obeso,
perder sólo el 10 por ciento de su peso corporal puede mejorar su salud.
Pierda peso gradualmente - ½ a 2 libras por semana. No haga dietas de moda.
Pueden dañar su salud. Hable con su médico sobre el mejor plan con el que
usted pueda perder peso.
-
Sea
activa. Haga ejercicio físico durante al menos 30 minutos casi todos los días
de la semana. El ejercicio regular es muy importante en el control del peso
y tiene muchos otros beneficios para la salud.
Algunos ejemplos serían caminar, trabajar en el jardín, los quehaceres domésticos
y bailar. El ejercicio más enérgico puede elevar el nivel de LAD ("el
colesterol bueno") y fortalecer su corazón. Esta clase de actividad se
denomina "aeróbica" e incluye correr, nadar, saltar la cuerda,
caminar a paso ligero o andar en bicicleta. Asegúrese de aumentar
gradualmente el nivel de actividad durante un período de varias semanas.
Consulte con su médico antes de iniciar un programa de ejercicios enérgicos.
-
Aliméntese
bien. Coma porciones más pequeñas, consuma alimentos con menos grasa y
calorías, y siga las Pautas Alimenticias para los Estadounidenses. Estas
pautas recomiendan comer muchas frutas, verduras y granos enteros. Trate de
comer cinco raciones de frutas y verduras todos los días. Elija alimentos
bajos en grasas saturadas y consuma menos alimentos con alto contenido de azúcar
o sal.
Si
tiene exceso de peso o es obeso, hable con su doctor o proveedor de cuidado médico
sobre las formas de mejorar su salud. Si ya tiene problemas de salud
relacionados con la obesidad, como la hipertensión sanguínea o diabetes, siga
el plan de tratamiento recetado por su doctor.
Créditos: The
National Women's Health Information Center
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